Mini-oda a las amanecistas que estuvieron presentes el sábado 16 de junio en el conciliábulo general del Amanecismo central y omnímodo
Aunque no paso de ser un modesto diletante en el mundo de la lírica (sólo llevo una semana ejerciendo de poeta suplente), en una situación tan apurada como esta, tengo el gusto de dedicar a las amanecistas de sexo femenino (que ofrece un enorme atractivo desde el punto de vista del vicio y una eficacia impresionante) que estuvieron el sábado tanto de cuerpo presente como desdobladas místicamente, una pequeña composición poética (que no llega ni a la suela de los zapatos del ya legendario Cantar de mio Amanece):
Siempre bien acompañados
por mujeres muy turgentes
qué mozas encantadoras
qué limpias y qué prudentes.
Incluso tuvimos monja,
doña Inma y doña Kass
sólo tres, poco abundantes,
pero son el no va más.
Olvidar tampoco quiero
—sería poco elegante—
a doña Lola Bernad
qué tía despampanante.
Amigos (un poco frikis),
mis queridas calabazas,
repitamos cuanto antes
bebedizo y Vitalaza.
Y ahora me voy, que tengo la caballería de parto.
Plas, plas, plas!!! Parece que el suplentismo lírico afila el ingenio, corroe la estulticia y cercena el aburrimiento. Lo decía Cicerón, de corrido, que hablaba muy bien, el tio jodido.
¡BRAVOOO! ¡VIVA LA SECCIÓN JUGLARESCA DEL AMANECISMO OMNÍMODO!
¡Qué arte, qué ritmo, qué cultura, qué labia, qué elección de palabras ( y de actos) qué tino, qué acierto, qué grasia, qué cuerpo de Góngora se me ha puesto jodios!!!!!!!!
Gracias guapa. Aunque lo de la elección de actos no lo entiendo muy bien ¿no será de tactos (torpes)? Por cierto, todavía estoy recuperándome de la foto del tío feo ese que pretende ser yo que publicaste. A este paso nunca voy a dejar de ser catecúmeno.
Pues no sé, me ha salio así. Por cierto, ¿cómo lleva usted lo de catecúmeno?